En noviembre de 2013 nos dejó a causa del cáncer Albert Jovell, médico especializado en Medicina Preventiva y Salud Pública, profesor universitario y activista convencido de la implicación de los pacientes como agentes muy activos en los sistemas de salud y en todo lo relacionado con el proceso de su enfermedad. Fue presidente del Foro Español de Pacientes.
Divulgador con altísimas capacidades comunicativas, autor de numerosos artículos y libros imprescindibles y, sobre todo, un provocador en el mejor sentido del término, empezó a dar cuerpo al concepto de la humanización de la asistencia sanitaria aun antes de que se popularizara esta denominación.
“Los médicos enfermos tenemos mucho que aportar a la relación médico-paciente porque hemos vivido en los dos lados", decía. Su experiencia le llevó a descubrir que "el médico bueno te informa y te comunica, te oye pero también te escucha, te entiende y te acompaña”.
En el reciente Encuentro Nacional de Pacientes organizado por el Foro Español de Pacientes, una de las sesiones se dedicó a "Democratización en Salud. Legado de Albert Jovell". En ella participó el presidente de Asomega, Julio Ancochea, amigo personal de Jovell y heredero confeso de su pensamiento en relación a la actividad del médico, su relación con el paciente, su obligación de implicarse con él, de trabajar con él y de acompañarlo.
"Estés donde estés, gracias Albert"
El presidente de Asomega rememoró su relación relatando cómo, siendo presidente de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ), contó con la colaboración de Jovell para poner en marcha Separ Pacientes, que se concretó "en junio de 2007 cuando en la sede de Separ firmamos un documento que se llamó el Compromiso de Barcelona. Eso es lo primero que me gustaría destacar de Albert. ¿Qué significa compromiso? Obligación contraída, palabra dada".
Compromiso, un concepto íntimamente unido a otro que, además, dio título a uno de los libros de Jovell: "La confianza". Para Ancochea, "es básica para la vida, los derechos humanos, la democracia". Explicó que ese libro lo acaba con el discurso político de Barack Obama, recordando que "lo que nos une es más grande que lo que nos separa, necesitamos una nueva forma de hacer política basada en identificar todo aquello que nos une".
El presidente de Asomega se refirió a otros libros de Jovell como "Liderazgo", en el que insta a ser menos gestor y más líder, que te movilicen tus sentimientos, que te identifiquen tus valores, aprende a manejar tus emociones, conoce tus limitaciones, sé humilde, sonríe, escucha. La adversidad te enseña a ser mejor". O su obra "Cáncer. Biografía de una supervivencia", que habla sobre todo "del tiempo recobrado".
Ciencia, arte, valores y sentimiento
En esta sesión sobre el legado de Albert Jovell, Julio Ancochea desveló que el lema que inspira la acción de Asomega parte en buena medida de su pensamiento, basado en la defensa de una medicina fundamentada en los afectos, en el médico persona. "Porque los médicos somos personas que trabajamos con, por y para personas que piensan, sienten, lloran, sufren, se enamoran", señaló el presidente de Asomega.
"Marcó mi vida, mi labor como jefe de Servicio y como profesor de universidad", afirmó. Y añadió que sus proyectos para tratar de recuperar los valores, la visión humana y humanista de la Medicina, como Be Neumo Be You de su servicio de Neumología en el Hospital de La Princesa o la propia Asomega, "se lo debo a Albert. De él aprendimos que la medicina es ciencia, también arte, por supuesto valores, y sentimiento".