Caracterizar la carga de las enfermedades respiratorias crónicas a nivel mundial, proporcionando un análisis completo y actualizado sobre tendencias geográficas y temporales de 1990 a 2017. Este es el objetivo del artículo dirigido por Joan B. Soriano, miembro de Asomega, que publica el último número de The Lancet Respiratory Medicine.
Realizado a partir del Global Burden of Disease (GBD) 2017, el estudio muestra que las enfermedades respiratorias crónicas siguen siendo una de las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo, con un crecimiento en números absolutos pero una fuerte disminución en varios estimadores estandarizados por edad desde 1990. Además, concluye que la mortalidad prematura por enfermedades respiratorias crónicas parece ser más alta en las regiones con menos recursos sanitarios per cápita.
En concreto, señala que cerca de 545 millones de personas en el mundo tenían una enfermedad respiratoria crónica en 2017, lo que supone un aumento del 39,8 por ciento respecto a 1990. Tomando estos mismos años como referencia, la mortalidad por esta causa creció un 18 por ciento.
La EPOC y el asma fueron las principales causas de muertes en todo el mundo dentro de este tipo de patologías, mientras que la enfermedad pulmonar intersticial y la sarcoidosis pulmonar fueron la segunda causa de muerte en los países de altos ingresos, América Latina y el Caribe, Europa central, Europa oriental y Asia central.
Como ha señalado el propio Joan B. Soriano en Twitter, "medir bien estos 545 millones de personas con alguna enfermedad respiratoria crónica, es el primer paso para curar…".